La discriminación es un problema muy importante. Podemos
encontrarnos con diferentes tipos de discriminación (sexo, raza, físico,
orientación sexual, etc.) y en diferentes contextos.
En las aulas se puede ver reflejada la discriminación en
muchos ámbitos. Por ejemplo, cuando el Estado no reparte ayudas de manera
educativa o cuando los profesores prestan más atención a unos alumnos que a
otros. Existen diferentes tipos de discriminación: físicas, psicológicas, de
género, económicas y socioculturales.
La discriminación se hace patente con una serie de
indicadores, como pueden ser la depresión, la tartamudez o el retraso en el
aprendizaje.
Existe una serie de propuestas pedagógicas para combatir la
discriminación en el aula. Por ejemplo: el trabajo en grupos y en parejas
rotativas, atender por igual a los niños con problemas de integración y al
resto, realizar muchas prácticas comunes, tener en el aula un espacio
personalizado de conversación, colaborar con las familias, evitar la diferencia
de trato, no utilizar objetos que den lugar a la discriminación, revisar los
recursos didácticos que se van a utilizar, evitar atribuir oficios de manera
estereotipada, etc.
- Reflexión.
La discriminación es un tema que nos debería preocupar tanto
a padres y profesores como a la sociedad en general. Y que, además es responsabilidad de todos.
En el aula, en la actualidad existe cierta discriminación.
Por parte de los alumnos y en ocasiones, incluso de los profesores y
profesoras.
Como hemos visto anteriormente, los maestros pueden hacer
uso de diferentes recursos para poder evitar esta discriminación. Es
responsabilidad suya cuidar los recursos didácticos que se utilizan, así como
el trato que se les da a los alumnos y los valores que se les inculca.
En ocasiones, por intentar ayudar a los niños y niñas que
tienen problemas de integración caemos en el error de prestarles más atención o
una atención diferente a la que prestamos al resto, y esto supone una
discriminación. Por lo que se debe ayudar a los niños con problemas aplicando
las técnicas aprendidas.
Para fomentar la igualdad en el aula se deben potenciar las
actividades de trabajo cooperativo, en las que puedan relacionarse todos con
todos y se evite la discriminación y la marginación. Con esto, además de evitar
la marginación por parte de los profesores y fomentar las relaciones entre los
alumnos, se inculcan una serie de valores a los niños y niñas.
Aunque cada vez es menos común, aún existen casos de
discriminación negativa por parte de profesores o de entidades educativas, por
motivos raciales, de género, etc. Tras estas discriminaciones hay niños y niñas
que hacen referencia a ellas a los padres y madres y estos tienden a
ignorarlos, ya sea porque no se les da la importancia que en realidad tienen o
por que no se cree a los niños. Con este comportamiento estamos cayendo en un
error, puesto que no debemos restar importancia a situaciones de este calibre,
sino ponerlas en conocimiento del director/a del colegio, para que se tomen las
medidas oportunas.
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